Pudin de calabacín y queso, presentación:
Pudin de calabacín y queso. Este pudin tiene una textura muy fina y delicada. Esto hace que, aunque sus ingredientes sean económicos, se pueda servir incluso en una comida de fiesta. Lo sirves con unas tostas, un poquito de mayonesa (si quieres) y conviertes este humilde pudin en un plato de alta alcurnia.
El aporte de los quesitos en porciones le da mucha cremosidad y un sabor muy especial y delicioso, así que te animo a prepararlo porque estoy segura de que te va a encantar.
Te voy a dejar la receta de un paté que seguro te gustará, que aunque sea bastante diferente que el pudin de calabacín, creo que te puede resultar interesante: foie de pollo.
- Servicios: Para 8-10 personas
Pudin de calabacín y queso
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Ingredientes
- Aceite de oliva - 3 cucharadas soperas
- Mantequilla - o margarina, 30 gramos
- Cebolla - 1 grande o dos medianas
- calabacín - 3 medianos
- Leche evaporada - 200 ml
- Huevos - 3
- Quesitos en porciones (tipo Caserío) - 10 unidades
- Sal
- Pimienta negra molida
Instrucciones
1.-Pelamos y troceamos la cebolla. En una sartén amplia ponemos el aceite y la mantequilla al fuego y cuando la mantequilla se haya derretido, añadimos la cebolla. La guisamos a fuego medio removiendo con frecuencia.
2.-Cuando la cebolla se esté poniendo dorada, lavamos los calabacines, les quitamos la zona del tallo y del rabito, los troceamos y los incorporamos a la cebolla, lo mezclamos todo y dejamos que se guisen a fuego medio, removiendo de vez en cuando. Precalentamos el horno a 180º y ponemos la bandeja con agua, porque el pudin se hace al baño María.
3.-Una vez listos la cebolla y los calabacines, los batimos junto con la leche evaporada, los huevos, los quesitos, la sal y la pimienta y ponemos este puré en un molde rectángular (el mío es de litro y medio) y lo ponemos en la bandeja del horno que tenemos preparada para el baño María. Horneamos durante unos 50 minutos. En este caso, el truco de pinchar con un palillo hasta que salga limpio no funciona, ya que el pudin tiene una consistencia cremosa y siempre os va a salir con restos, así que tenlo en el horno hasta que esté dorado por encima y al tocarlo esté consistente.
4.-Cuando el pudin esté horneado, lo dejamos enfríar por completo y lo desmoldamos pasando un cuchillo por todo el borde para que se despegue de las paredes del molde, ponemos un plato encima y le damos la vuelta como si fuese una tortilla. El pudin caerá por su propio peso sobre la bandeja. Listo para servir. Lo puedes acompañar de mayonesa, tostas, salsa holandesa,...
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todo RIQUISIMOOOOO….gracias
Buena pinta,lo haré