Me gusta la comida agridulce (ya os iréis dando cuenta) y esta receta la tenía desde hacía tiempo y es la segunda vez que la hago, y esta vez ha sido para celebrar nuestro octavo aniversario de boda (y que se cumplan muchiiiiiisimos más jajajaja).
Cuando compréis el mango procurad que esté maduro, para que esté más dulce y el contraste de sabores sea mayor.
El mango tiene muchas propiedades, entre ellas es rico en fibra y vitaminas A y C (200  gramos de mango cubren las necesidades de una persona de estas vitaminas) y magnesio.

Ingredientes:
-1 cebolla
-un mango
-mantequilla
-jengibre
-cúrcuma
-sal
-un chorro de tomate frito
-300 gr de gambas
-1 bote de leche de coco
-perejil para espolvorear (opcional)
Preparación:

 

Se pica la cebolla y se rehoga en la sartén con mantequilla. Una vez dorada, se le añade el mango cortado a trozos, una pizca de sal, el jengibre rallado al gusto y la cúrcuma. Cuando el mango esté tierno, echar el chorro de tomate frito, la leche de coco y dejar cocer unos minutos. Pelar las gambas e incorporarlas y cuando se hagan, servir en una fuente y espolvorear perejil picado.